El turismo en los centros historicos

Centros historicos

En esta circunstancia, la realidad de las ciudades históricas es incuestionablemente muy heterogénea; mientras que en algunos casos, como Venecia, Praga, Santiago de Compostela, Florencia, Oxford o incluso Toledo, ya hay problemas importantes de saturación y congestión, en muchos otros, muchos continúan creando campañas promocionales dirigidas a elevar la cantidad de visitantes, considerar el turismo como un factor importante de dinamización socioeconómica y recuperación de las economías urbanas en crisis.

En cualquier caso, existe un importante desafío operativo: existe que superar la fase meramente promocional de la gestión turística y afrontar el reto de ordenar el turismo en la ciudad, superando supeditar la ciudad al turismo y avanzando en el sentido de lograr que la dimensión turística, con todas sus implicaciones, se integre en el marco de una realidad urbana habitable y multifuncional.

Las autoridades municipales y las administraciones turísticas deben saber qué convertir las ciudades históricas en un mero "producto turístico", aunque esta función sea muy importante en el mercado de su ciudad, implica asumir riesgos graves. Estos riesgos pueden incluir la sobrecarga de la capacidad de carga, la pérdida de una vida urbana equilibrada, el deterioro de las condiciones ambientales y la destrucción del patrimonio cultural y arquitectónico.

En el siglo XXI, las ciudades históricas europeas, que son depósitos de un rico patrimonio cultural e histórico, están estrechamente relacionadas con el turismo. Su objetivo turístico ha sido reforzado recientemente, aumentando la simbiosis entre ciudad y turismo. De hecho, con dimensiones positivas y negativas, plantea nuevos problemas en relación con el equilibrio operativo de este municipio, la planificación urbana, las políticas de protección, la disponibilidad y la atmósfera urbana.

"El casco antiguo de una ciudad constituye su espacio histórico por excelencia y lo, en gran medida, la memoria colectiva de la sociedad que lo habita, siendo un auténtico libro de donde los vestigios del pasado nos revelan la historia de la ciudad y la de sus habitantes" (Levy, 1987).

En la actualidad se hizo imprescindible aplicar el criterio de sostenibilidad en la reurbanización y desarrollo de la ciudad. A nivel mundial, entre las iniciativas de la Cumbre de la Tierra, celebrada en Río de Janeiro en 1992, se fomentaron las iniciativas locales de apoyo al desarrollo sostenible. En el ámbito europeo, el Tratado de Amsterdam de 1999 confirmó (artículos 2 y 6) que el desarrollo equilibrado y sostenible junto con la seguridad y el avance de la calidad del medio ambiente son objetivos fundamentales de la Unión Europea. Sin embargo, este grado (de sostenibilidad) no fue exagerado en el contexto de instalaciones históricas.

Otro elemento a considerar es valorar la ciudad construida, mejorar sus infraestructuras, promover el reciclaje y preservar el legado construido. Esto conduce a mejorar la identidad cultural, reforzando la calidad estética y paisajística de su entorno urbano. Generar diversidad y sofisticación urbana (tanto en residencia, actividad económica, oferta cultural y soluciones), ayudando a disminuir las necesidades de movilidad, lo que aumentará el atractivo como lugar de residencia, trabajo y ubicación de las actividades. Mejorar sustancialmente las condiciones de vida y la cohesión social y la cohesión de la ciudad: una mejor calidad de vida (hogar, escolaridad, trabajo, salud, cultura, ocio ...), ayudaría a recuperar la noción de ciudad como un trabajo frecuente para contribuyentes.

Precisamente de la misma manera se formula la necesidad de promover el dinamismo económico. Esto se puede hacer mediante la creación de talleres y escuelas de actividades convencionales relacionadas con el entorno, como restauración (renovación), artes plásticas, artesanías, etc., en las que la instrucción y la formación son una medida previa a la consolidación económica. No es posible estar solo en un mercado basado en tiendas de recuerdos y recuerdos durante el día y bares y restaurantes por la noche.